Según la fuente oficial de información de Xataka.
Un innovador procedimiento de fecundación in vitro que utiliza el material genético de tres personas para evitar enfermedades mitocondriales ha dado resultados prometedores en el Reino Unido. La técnica, conocida como transferencia pronuclear, ha permitido el nacimiento de al menos ocho bebés sanos, según un reciente estudio británico. La principal ventaja de este avance es que podría detener la transmisión de enfermedades incurables que afectan el funcionamiento celular energético.El objetivo central de esta técnica es evitar la herencia de mutaciones en el ADN mitocondrial, que se transmite únicamente por vía materna y puede causar graves afecciones, especialmente en órganos que requieren altos niveles de energía como el corazón y el cerebro. Al extraer el núcleo del óvulo fecundado con mutaciones y trasplantarlo a un óvulo sano de una donante, se crea un embrión con el ADN nuclear de los padres y el ADN mitocondrial de una tercera persona.Los estudios publicados en la New England Journal of Medicine mostraron que, si bien la técnica no elimina por completo el ADN mitocondrial original, los niveles residuales en los bebés eran muy bajos, en ningún caso superiores al 16%. Cinco de los ocho nacimientos no presentaron mutaciones detectables, mientras que en los otros tres las mutaciones estaban por debajo del umbral de riesgo. Además, todos los bebés presentaron un desarrollo saludable durante el seguimiento clínico inicial.Más allá de los resultados científicos, este avance ha despertado un debate ético y legal en varios países. En el Reino Unido, la técnica fue legalizada en 2015, pero en España aún no se ha autorizado debido a que su marco legal no contempla explícitamente este procedimiento. Por lo tanto, el uso de esta tecnología se encuentra en un limbo jurídico, ni aprobado ni prohibido, lo que impide su aplicación por el momento.Expertos españoles han destacado tanto el potencial de esta técnica como los desafíos éticos que implica, entre ellos, los efectos a largo plazo de combinar material genético de tres personas. “La técnica plantea interrogantes que aún deben resolverse antes de que pueda implementarse con seguridad y ética en más países”, subrayó Rocío Núñez Calonge, experta en bioética reproductiva.A pesar de estos desafíos, la experiencia del Reino Unido marca un precedente alentador. Con el avance de la investigación, se espera que este tipo de procedimientos pueda extenderse y ofrecer una solución a miles de familias que enfrentan enfermedades mitocondriales hereditarias. El seguimiento a largo plazo de estos niños será clave para evaluar la viabilidad definitiva de esta revolución genética.

